Los tomates (Solanum lycopersicum) son una especie de la familia de las solanáceas que proviene de América Central, y son una planta herbácea anual. Sí, anual aunque hoy en día podemos encontrar tomates en los mercados todo el año, pero su época únicamente se extiende de junio a septiembre. En esta época los frutos son más ricos en cuanto a valores nutricionales,además suelen ser más grandes, de piel más fina y mucho más carnosos. Aunque por sus características se asemeja más a una fruta, se incluye tradicionalmente en el grupo de las hortalizas.
Historia de los tomates
Los tomates son nativos de América del Sur, el fruto verde original parece tener su origen en las zonas altas de Perú. Estos de diversificaron en una docena de especies. Una de ellas Solanum lycopersicum fue llevada a México donde era consumido ya desde la prehistoria. Aunque la fecha de la domesticación se desconoce la evidencia apoya la teoría de que fue en Centroamérica y que se trataba de pequeñas frutas amarillas a la que llamaba xitomatl (jitomate) y la preparación de la salsa original se realizaba con sal y pimiento que se mezclaba con maíz.
Hoy en día los tomates se comen en todas las partes del mundo. Existe el falso concepto de que el tomate ha sido clave en la cocina italiana desde su introducción procedente de América. Pero este fue introducido a través de España en Europa en el siglo XVI, fue bastante más tarde que la salsa hecha a partir de esta hortaliza llegó a la cocina italiana, por aquel entonces a dicha salsa se le denominaba “salsa a la española”.
El tomate en nuestra alimentación
El tomate es un alimento muy popular que, dada su versatilidad, se puede consumir en múltiples preparaciones:
Crudo en ensaladas
Es la forma más sencilla y que requiere menos tiempo de preparación. Una pizca de sal y un chorrito de aceite de oliva virgen extra son un complemento perfecto para aliñarlos.
El tomate en conserva
Tanto triturado como entero y pelado es ampliamente consumido ya que permite disfrutarlo en invierno y ser usado como la base para salsa de tomate o como complemento a un rico guiso.
En salsa
Es el resultado de someter el tomate natural a un proceso de cocción con aceite vegetal, con la adición de otros ingredientes como cebolla, ajo, pimiento, especias, etc. y envasado en recipientes cerrados herméticamente y conservado mediante el tratamiento térmico adecuado. Además d ella conocida salsa de tomate española, esta es la base para la elaboración de otras salsas italianas como Puttanesca, Boloñesa, etc…que se han hecho muy populares gracias a los platos de pasta, carne, pescado o pizza que suelen acompañar.
En zumo
Aunque en España no somos grandes consumidores de este zumo, es una alternativa muy saludable.
En sopas frías
Existen platos tan populares como el gazpacho o el salmorejo en los que se emplea el tomate junto a pan, aceite, vinagre, ajo y otros vegetales en forma triturada o licuada
En sopas calientes
El tomate resulta absolutamente deliciosa. Con una base de ajo, cebolla, laurel, zanahoria y calabacín, y una buena cantidad de tomates maduros, elaboraremos una sopa deliciosa, perfecta si la acompañamos con un huevo poché.
En asados y guisos
Completa el plato y lo hace más jugoso.
En pistos
Junto a otros vegetales de la temporada de verano como el pimiento y el calabacín, resulta delicioso y un acompañamiento delicioso para platos de pescado o huevos.
Propiedades nutricionales del tomate
Se trata de un alimento poco calórico, aproximadamente unas 20Kcal. por cada 100 g. Hay que resaltar que el aporte de azúcares simples es superior a otras hortalizas, también es rico en fibra, vitaminas del complejo B como la B1 y la B3, provitamina A, vitaminas C y E y es rico en potasio y fósforo como minerales principales. Los efectos antioxidantes derivados de su alto contenido en carotenos y las vitaminas C y E lo hacen muy recomendable para la salud. Su color rojo se debe a la presencia de licopenos, que son pigmentos de tipo antioxidante. Es importante incluir estos compuestos en nuestra alimentación ya que no son sintetizados por nuestro cuerpo, por lo que debemos aportárselo a través de los alimentos que ingerimos. Como curiosidad hay que decir que el licopeno no se destruye con el calor, al contrario, su capacidad de absorción aumenta si lo tomamos caliente , como por ejemplo en pistos, salsas de tomate o sopas. Además, si incluimos aceite en la preparación, la absorción será aún mayor.
Agua de tomate con queso Arla
Crema de tomate con especias
Existen otros platos en los que resultan deliciosos como los tomates asados, rellenos, en cocas, etc…sin duda, uno de los alimentos más polivalentes de nuestra huerta de verano. ¿Cuál es tu plato favorito con tomates?
