Aprendemos a preparar lenguado a ‘la meunière’ con mantequilla. Os lo recomiendo a toda la familia, pero sobre todo a aquellos que arrugan un poco el morro con el pescado. Destacamos el sabor suave y cítrico de este plato tan fácil de preparar. A los niños les va a encantar, es una forma de introducirles alimentos en la dieta.
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Para estos días de calor, nada como una sopa fría para refrescarse a la hora de la comida. Hoy Mario Sandoval nos presenta esta original receta, nutritiva, sabrosa y muy sencilla de preparar:
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Puede parecer extraño hacer un cítrico a la plancha pero el pomelo chino lo permite. Siendo un gran desconocido en nuestra cocina, os presento un pomelo diferente, con menos zumo pero muy aromático, basta con desprender el envoltorio y ya apreciaremos ese aroma característico. El éxito de este plato no es más que la suma de todos sus ingredientes, la crema de soja aporta el toque lácteo, el bacalao su textura grasa y su sabor, el ácido del pomelo, el crujiente y la untuosidad del queso Hushall junto al toque fresco y crujiente de los ajos tiernos, ¡no se puedo contar, hay que probarlo!!
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¡Hola a todos! Ya estamos aquí otra vez. Hoy os traigo una receta muy sencilla y deliciosa que os permitirá quedar como reyes y reinas en un santiamén. El único secreto es utilizar gambones de calidad y sobre todo, que no sean cocidos (no se cocinarán ni soltarán los jugos igual). La salsa que se forma es perfecta para acompañar un arroz al vapor… parece un plato asiático, pero no tiene ningún misterio ni dificultad, ¡que lo disfrutéis!
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¡Hola a todos! Para terminar el mes de las especias os he preparado una crema de verduras con un toque muy especial, queso azul y ras el hanout. Para los que no lo conozcan, el ras el hanout es una mezcla de especias marroquí que se utiliza frecuentemente en los cus-cús, por ejemplo. Existen diferentes variedades, pero normalmente lleva comino, cardamomo y nuez moscada, entre otras especias, y tiene cierto toque picante.
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No es un revuelto cualquiera, normalmente acostumbramos a llamar revuelto a un huevo cuajado acompañado casi de cualquier cosa, en éste caso, lleva más trabajo pero el resultado no es ni parecido, podríamos comparar la textura de éste revuelto con la textura de una crema pastelera, y simplemente hará falta, un calor muy suave y mucho movimiento. Si a esto le sumamos que el queso se comenzará a fundir con el calor del revuelto y lo mezclamos con el sabor apuntado del jamón de pato, estamos ante un gran plato con cuatro ingredientes, veamos como se hace.
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