7 curiosidades que no sabes de la quinoa

quinoa

La quinoa se ha popularizado en los últimos años, sobre todo en restaurantes veganos, macrobióticos y opciones sin gluten. Son unas semillas redondas de color arena, a veces rojizas y hasta marrones, según la variedad. Os contamos su origen, propiedades, beneficios y utilización en la cocina.

Seguir leyendo

Recetas con espinacas

espinacas

Os recomendamos las siguientes recetas con espinacas frescas. Estas verduras son muy interesantes desde el punto de vista nutricional. Destacan por su aporte en hierro, calcio, potasio, vitaminas… ¡Elige una de nuestras recomendaciones y prepara tu plato de espinacas especial esta misma semana!

Seguir leyendo

Patatas asadas con ternera

Patatas Rellenas

Patatas asadas al horno con ternera y queso. En esta vídeo receta, el cocinero Mario Sandoval nos da algunas ideas para preparar este clásico. ¿Listos para un relleno de carne de ternera picada, jamón serrano y queso Havarti? El toque final será añadir una mozzarella suave, cremosa y con un perfecto fundido. ¡Un plato muy fácil, sabroso, económico y para comer recién gratinado! Ver receta »

Seguir leyendo

¿Puede tomar lácteos un intolerante a la lactosa?

lactosa
lactosa

Una de las mayores confusiones que se crea a la hora de dar consejo dietético a las personas con intolerancia a la lactosa o con alergia a la proteína de leche de vaca, es la mezcla de pautas que se hace entre ellas. Es muy común acabar confundiendo ambas condiciones, y llegar incluso a decir “alergia a la lactosa” o “intolerancia a la leche”. Dentro de la aplicación de las medidas de seguridad que hay que seguir para llevar un patrón de dieta salud, una de las que despierta mayores dudas es la presencia de pequeñas cantidades (trazas) de lácteos, ingredientes de la leche, o de contaminación cruzada. En el post de hoy aclararemos alguna de estas dudas.

¿Puede tomar lácteos un intolerante a la lactosa?

Sí, normalmente puede aunque depende de la tolerancia individual. No se trata además de un acto “peligroso”,  puesto que existe una cantidad aunque pequeña de lactasa (la enzima que la digiere) que sigue funcionando, y los síntomas de la intolerancia son únicamente interstinales. Hay personas que toleran un vaso de leche, varias cuñas de queso… y gente que lo hace en mucha menor cantidad. Por el contrario, las personas que son alérgicas a la proteína de leche de vaca NO podrían tomar ninguna cantidad de ningún derivado lácteo.

¿Yogur y queso para un intolerante a la lactosa?

Yogur por lo general, sin problemas. Esto es debido a que la lactosa del yogur ha sido digerida por los microorganismos que encontramos vivos en él. Los lactobacillus se alimentan de la lactosa y la transforman en ácido láctico (misma molécula que generamos en nuestros músculos cuando hacemos ejercicio de alta intensidad). Nuestro cuerpo no precisa de lactasa para metabolizar ni digerir el ácido láctico, por lo que un yogur o un queso muy curado no presentan problemas.

Aquellos quesos más tiernos y menos madurados (como puede ser un queso fresco) son más parecidos a la leche y sí que tienen más cantidad de lactosa, por tanto los toleraremos en menor medida y su consumo producirá alteraciones intestinales a menor cantidad que un queso curado.

Fórmulas sin lactosa en el mercado

Lo que hacen las fórmulas sin lactosa es reproducir el mecanismo que hace que nuestro cuerpo descomponga la lactosa y así pudiéramos digerirla. Los productos sin lactosa son la opción perfecta para tolerar sin problemas una dieta rica en calcio.

lacteos

¿Y si en el etiquetado aparecen derivados o trazas de leche?

No, si eres intolerante a la lactosa. Esas trazas muy pocas veces serán lactosa en sí misma, y si contienen lactosa será en muy baja proporción.

Las personas que sí que tienen que extremar precauciones con la contaminación cruzada son aquellas que sean alérgicas a la proteína de leche de vaca. Deben estar atentos a cualquier derivado o ingrediente lácteo (ácido láctico o fermentos lácticos), porque hasta una pequeña cantidad puede desencadenar una reacción alérgica muy agresiva. Afortunadamente, y con la nueva legislación de etiquetado, habría que observar en el apartado de alérgenos del producto si ese alimento contiene o no derivados de la leche.

Alcachofas al horno

alcachofas
alcachofas

Ingredientes para alcachofas al horno

Tiempo de  elaboración

Dificultad: media

¿A cuántos grados se hace al horno la alcachofa?

  • Es innegable que cocinar las alcachofas al horno tiene grandes ventajas como la de que el aparato se encarga de gran parte del proceso, permitiéndote hacer otras cosas mientras él “trabaja”. Además, el resultado es delicioso y aprovechas gran parte de esta verdura.

    En cuanto a los grados recomendados, generalmente basta con ponerlas a 180º durante aproximadamente 20 minutos. Aunque los grados y el tiempo pueden variar según el tipo de receta (se especificaría en la misma), estos son los habituales.

Preparación de alcachofas al horno con queso

Las alcachofas al horno siempre son una deliciosa opción a la hora de cocinar, y de hecho hay bastantes variantes de esta receta, ya que admiten casi cualquier relleno que se te ocurra. Además, resultan una excelente forma de hacer que aquellos que son reacios a comer algo tan importante y beneficioso como las verduras las consuman. También puedes usarlas como guarnición o aperitivo.

En esta ocasión vamos a ver una forma que, aparte de rápida y sencilla, es también una de las más sabrosas y saciantes: “Alcachofas al horno con queso”.

Además, al cocinar las alcachofas al horno consigues aprovechar también sus hojas, pues de esta forma quedan muy jugosas. Cuando se hacen de otras maneras, en cambio, hay que desecharlas, teniendo que quedarnos apenas con el corazón.

Receta paso a paso

  1. Pica una cebolla y rehógala junto a los ajos, la guindilla cayena y la hoja de laurel. Agrega después el pimiento verde (primero), los tomates (troceados y pelados), el jamón (cortado en dados pequeños). Deja que todo se rehogue durante unos minutos.
  2. Ahora, echa un poco de agua en una cacerola y disuelve en ella dos cucharadas de harina y el jugo de un limón. Agrega también un poco de sal.
  3. Limpia las alcachofas y vete echándolas en la cacerola con agua. Cuécelas hasta que estén tiernas.
  4. Una vez que las alcachofas estén cocidas y tiernas, quítales el tallo y vete agregándolas al sofrito.
  5. Vamos a ponernos con la patata: pélala, lávala, sécala, córtala en daditos y agrégala también al sofrito.
  6. Cubre todo con agua y añade los guisantes y salpimenta. Deja que cueza, a fuego alto, hasta que veas que la gran parte del líquido se evapora.
  7. Engrasa una fuente apta para horno y coloca en ella las alcachofas. Casca un huevo de codorniz dentro de cada una de ellas, salpimenta un poco y échales el queso por encima.
  8. Una vez hecho esto, mete la fuente con las alcachofas al horno a 180º y deja que se hagan durante un cuarto de hora aproximadamente.

Y ya está: ya tienes tus deliciosas alcachofas al horno con queso. Emplata junto con el sofrito. La combinación es deliciosa.

Nuestro secreto es... 
150 g de queso rallado Pasta & Gratinar Arla

El queso le proporciona la cremosidad a la receta.

queso rallado Finello Pasta para gratinar

Focaccia de queso

focaccia-queso

Os animamos a preparar pan casero en casa. Como podréis comprobar, es una receta muy sencilla que no necesita amasadora. ¡Atentos al paso a paso del cocinero Mario Sandoval para esta focaccia de queso!

Seguir leyendo