La cúrcuma, llamada también “azafrán de la India”, es muy conocida como una especia que puede condimentar una gran cantidad de platos. Además de eso, también cuenta con grandes propiedades que pueden ser muy beneficiosas para tu salud. De todo eso vamos a hablarte detalladamente en este artículo. Para completar la información, te daremos unas recetas en las que tiene un gran protagonismo.
Esta especia, cuyo nombre científico es Cúrcuma longa, proviene de la raíz naranja de una planta originaria del sur de Asia que pertenece a la familia de las herbáceas. Debido a su sabor, que fusiona un toque dulzón con un poco de picante y amargor, suele usarse en cantidades muy pequeñas.
Composición nutricional de la cúrcuma
Lo cierto es que, aunque la cúrcuma incluye nutrientes tan beneficiosos como proteínas, fibra, vitaminas, sodio, calcio o potasio, su valor nutricional suele ser escaso debido a la poca cantidad de cúrcuma que se consume cada vez (especialmente si se usa como condimento).
No obstante, existe otra alternativa para obtener todos estos beneficios en una cantidad más adecuada; por ejemplo, en cápsulas o en polvo. Sin embargo, hay que ser muy estricto con la cantidad diaria recomendada, pues un aumento significativo de la dosis podría llegar a causar problemas digestivos llegando a ser contraproducente.
Estas es la composición nutricional de cada cucharadita de 3 gramos de cúrcuma:
- Calorías: 9,02
- Hidratos de carbono: 2,01 g
- Grasa total:0,10 g
- Proteína: 0,29 g
- Fibra: 07 g
- Fósforo: 09 mg
- Magnesio: 06 mg
- Hierro: 1,65 mg
- Sodio: 1 mg
- Zinc: 0,14 mg
Para que queden un poco más claras las formas en las que se puede tomar la cúrcuma, vamos a recapitularlas en el siguiente apartado.
Beneficios y propiedades de la cúrcuma
La cúrcuma contiene varios elementos que le otorgan unos geniales efectos sanadores. Por ejemplo, proteínas, azúcares y resinas. También unos aceites volátiles llamados atlantone, zingiberene y turmerone y unos compuestos llamados curcuminoides (demetoxicurcumina, curcumina y bisdemetoxicurcumina), que completan estas cualidades.
Y no solo eso, también tiene vitaminas E, K y C, sodio, fibra dietética, niacina, calcio, cobre, potasio, magnesio, zinc y hierro. Vamos a ver cuáles son algunos de los beneficios que la cúrcuma puede aportar a tu organismo.
Antiinflamatorio
Gracias a los curcuminoides que contiene, la cúrcuma es un potente antiinflamatorio. Lo es casi tanto como algunos medicamentos antiinflamatorios, pero con la ventaja de que no tiene sus efectos secundarios.
Por esto mismo, es muy recomendada para aquellos trastornos en los que haya implicada una inflamación como las enfermedades del intestino, colon irritable, artritis, colitis, obesidad, síndrome del túnel carpiano o trastornos menstruales.
Antidepresivo natural
La cúrcuma es usada por la medicina tradicional china desde hace siglos para tratar problemas como la tristeza o la depresión. Lo que la hace tan beneficiosa para tratar esto es su extracto (cúrcuma en polvo), que activa el sistema inmunitario, despierta el estado de ánimo y estimula el sistema nervioso.
También produce un aumento de la serotonina, por lo que es perfecta para reducir el estrés, así como las depresiones emocionales y estacionales y otros trastornos relacionados con ellas.
Anticancerígeno
Diversos estudios han comprobado que el rizoma de la planta de la que proviene tiene por lo menos diez componentes anticancerígenos como la curcumina o los betacorenos. Estos protegen de algunos tipos de cáncer como el de mama o el de duodeno. Asimismo, ayudan al organismo a resistir los efectos debilitantes de los medicamentos y los tratamientos destinados a combatir esta enfermedad.
Tónico biliar
La curcumina y otro de sus componentes hepatoprotectores sirven ayuda a la hora de favorecer el drenaje hepático y eliminar piedras de la vesícula biliar. Además, gracias a sus propiedades antiinflamatorias, está recomendada para aquellos que tienen trastornos de vesícula, ictericia o cirrosis hepática.
Protege contra las enfermedades cardiovasculares
Los componentes de la cúrcuma también tienen propiedades cardioprotectoras. Consumirla con frecuencia ayuda a prevenir enfermedades cardiacas, y también sirve para prevenirlas. Además, reduce los triglicéridos y el colesterol malo. Los expertos recomiendan que, para completar una dieta pobre en grasas, sana y natural, algo ideal es condimentar los platos con cúrcuma para evitar infartos y otras enfermedades cardiovasculares.
Cómo se toma la cúrcuma
Como te hemos dicho antes, la cúrcuma es conocida sobre todo como condimento, pero lo cierto es que consumida así es muy difícil beneficiarse adecuadamente de sus propiedades, pues se trata de una dosis muy pequeña. Para eso, hay otras alternativas; eso sí, siempre sin excederte de las cantidades recomendadas. Vamos a ver cuáles son algunas de las principales.
- Infusión a base de polvos: generalmente fusionada con otra planta. En este caso la cantidad recomendada es 20 gramos por litro de agua, con 3 vasos diarios como máximo (en tratamientos discontinuos).
- Extracto líquido concentrado: como máximo, 3 dosis diarias de 25 gotas.
- Jarabe de limón: como desintoxicante y para perder peso. En este caso, la cantidad vendrá en las indicaciones del jarabe.
- Tintura: la cantidad máxima en este caso es de 50 a 80 gotas diarias en cuatro tomas. Lo ideal es mezclarlas con un zumo de frutas.
- Cápsulas: unos 50 mg diarios.
- Suplementos de curcumina: estos están asociados a complejos de oligoelementos o de fosfolípidos que ayudan a favorecer su absorción. La dosis recomendada es de 500 mg diarios repartidos en 3 dosis.
- Aceite de cúrcuma: se aplica de forma externa, para varios usos. Por ejemplo, como repelente de insectos, funguicida o sobre la piel inflamada. Asimismo, un masaje con este aceite sirve para aliviar el dolor de distintos miembros del cuerpo que estén afectados por dolencias como contracturas musculares o inflamaciones reumáticas.
- Con cataplasmas de cúrcuma de puede curar el acné y otro tipo de impurezas en la piel.
Recetas con cúrcuma
Para que compruebes por ti mismo su característico sabor y sus propiedades, vamos con dos recetas donde la cúrcuma tiene un gran protagonismo.
Caldo de cúrcuma y jengibre
Este caldo es ideal para entrar en calor en días fríos, así como para mejorar los síntomas del resfriado y subir la energía cuando notas que está baja.
Ingredientes para el caldo de cúrcuma y jengibre
- Caldo vegetal (de 2 a 3 tazas).
- Una cucharada pequeña de cúrcuma fresca.
- Una cucharada pequeña de jengibre fresco rallado.
- Pimienta negra (una pizca).
- Un diente de ajo.
- Sal marina.
- Aceite de oliva virgen.
Elaboración del caldo de cúrcuma y jengibre
- Pon unas gotas de aceite en una cazuela y agrega el jengibre, la cúrcuma y el diente de ajo (todo machacado previamente).
- Remueve durante un par de minutos y añade también el caldo vegetal, la sal y la pimienta.
- Cocina durante unos 10 minutos con temperatura suave.
- Pasa todo por la batidora. Prueba para ver si está convenientemente salpimentado y rectifica si es necesario.
Listo. Ya tienes tu reconfortante caldo de cúrcuma y jengibre preparado.
Batido de plátano con cúrcuma y otras especias
Un batido perfecto para complementar un buen desayuno o para tomar a cualquier hora del día. La variedad de especias con las que se elabora le da un sabor estimulante sabor exótico. Ingredientes como el anís o la cúrcuma también son perfectos para combatir los gases. La elaboración es muy rápida y sencilla.
Ingredientes para el batido de plátano con cúrcuma y otras especias
- Cuatro plátanos congelados (aproximadamente unos 100 gramos).
- Media cucharadita de cúrcuma.
- Media cucharadita de canela.
- Un trozo de jengibre fresco.
- Un cuarto de cucharadita de cardamomo molido.
- Media cucharadita de anís molido.
- 750 ml de leche de avena (para que te hagas una idea, unas 3 tazas y media).
Elaboración del batido de plátano con cúrcuma y otras especias
- Pon todos los ingredientes en el vaso de la batidora.
- Bátelos hasta que veas que están correctamente batidos e integrados unos con otros).
Más fácil imposible, ¿verdad?. Para darle un toque todavía más especial, puedes añadirle una pizca de sal. Además, el sabor se potenciará.
Esperamos haberte ayudado a descubrir todo lo que la cúrcuma puede ofrecerte. Como habrás visto, no son pocas las dolencias y enfermedades que puede aliviar y prevenir. Además, hay muchísimas formas de tomarla.