Por muchos platos que inventemos, las croquetas son las reinas de la casa. Las croquetas caseras son un recurso muy socorrido especialmente si estás pensando en preparar una cena rápida, porque la ventaja que tienen las croquetas es que las puedes congelar y cuando llegue el momento de la cena tan solo tienes que freírlas sin necesidad de descongelarlas previamente. Otra de las ventaja es que puedes hacerlas prácticamente cualquier ingrediente: con jamón serrano, con queso, con atún, con restos de cocido, con restos de pollo asado, con merluza o pescado blanco… Os enseñamos cómo hacer croquetas de una forma sencilla y eficaz: sofreír bien la harina para la bechamel, cocer bien la masa y utilizar buenos ingredientes. ¿Listos para preparar croquetas de jamón y croquetas de langostinos perfectas?
Ingredientes de las croquetas de jamón
- Leche entera 1L
- Harina 180 g.
- Mantequilla Lurpak con sal 160 g.
- Media cebolla dulce picada
- Dos huevos
- Pan rallado
- Sal
- Pimienta blanca
- Nuez moscada
Para la masa de las croquetas de jamón:
- Jamón Serrano Tierno 200 g.
Para la masa de las croquetas de langostino:
- Langostinos pelados 200 g.
Cómo hacer croquetas
1.Para comenzar, en una olla ancha y baja ponemos a fundir la mantequilla Lurpak con sal. Para ello corta la mantequilla en dados y ponla a derretir en una cazuela.
2.Cuando la mantequilla esté fundida añadimos la cebolla picada y la rehogamos a fuego suave para evitar que se dore.
3.Si queremos hacer croquetas de langostino, tendremos que rehogar el langostino en este momento junto con la cebolla.
4.El jamón al estar curado, podemos añadirlo después de la harina o rehogarlo con la cebolla.
5.Después añadimos la harina. Removemos bien y sofreímos la harina 3 o 4 minutos para evitar que adhiera el sabor a cebolla cruda.
6. En este momento, añadimos la leche a temperatura ambiente.
7. Ahora trabajaremos la pasta durante 10 minutos para que quede bien cocida. La pondremos a punto de sal y añadiremos la pimienta y la nuez moscada.
8. Pasado este tiempo, sacaremos la pasta del fuego y la podremos sobre una bandeja. Extiende la masa sobre una fuente. Unta la superficie con un poco de mantequilla para que no se haga costra o colocaremos un papel film en contacto directo con la masa y sin espacios de aire. Reservamos en la nevera hasta el día siguiente.
9. Cuando la masa esté fría, sacaremos un trozo y amasaremos. Después le daremos forma de cilindro. Con un cuchillo, iremos cortando poco a poco las porciones con el tamaño deseado.
10. Después, daremos forma a cada cilindro (alargada, redonda…)
11. Pasaremos las croquetas por un bol con huevo batido. Después por pan rallado.
12. A continuación freímos las croquetas en aceite bien caliente hasta que se doren.
13. Pondremos las croquetas en papel absorbente antes de servir.
¡Y ya están listas para tomar!
Trucos para preparar unas croquetas más sabrosas
- Puedes hacer croquetas de casi cualquier cosa, sólo tienes que tener en cuenta que lo que quieras añadir tendrá que estar cocinado o en su defecto cocinarlo en la mantequilla con la cebolla.
- Si no quieres utilizar cebolla, no hay problema, sigue los pasos de igual manera pero sin utilizar la cebolla, las croquetas saldrán más suaves de sabor.
- Normalmente cuando hacemos croquetas, obtenemos un número mayor de las que nos vayamos a comer, aprovecha y congela, aguantan la congelación muy bien. Sólo tienes que congelarlas en plano y sin amontonarlas, en una bandeja por ejemplo. Espera a que estén congeladas y sácalas de la bandeja, ahora puedes meterlas en una bolsa y no se pegarán.
Trucos para la bechamel
- Tamiza el harina para evitar los grumos que puedan aparecer.
- Si te aparecen grumos, aplástalos con el reverso de la cuchara.
- Una solución para evitar grumos, cuando esté lista la bechamel, pásala por la procesadora o batidora.
- Si se te va la mano con el tostado de la harina, la bechamel te quedará muy líquida, más allá de las proporciones de los ingredientes.
- La consistencia final de la bechamel la verás cuando esté a temperatura ambiente o fría. Pero ¿qué pasa si ya estás viendo que eso necesitará de un milagro para que tenga esas consistencia espesa que buscas? Mantenla a fuego bajo y revuelve constantemente hasta que el líquido se haya evaporado. Si quedó muy floja, mantenla en fuego muy bajo y sigue revolviendo. Las abuelas más vigorosas te dirán que por lo menos una hora.
Cómo darle forma a las croquetas
Una vez que consigas que tu bechamel tenga todos los ingredientes incorporados y hayas comprobado su sabor, es momento de estirar tu preparación en una fuente.
Para evitar que quede con una costra seca, cubre la superficie con papel film y deja reposar en la nevera. Muchas abuelas recomendaban dejarla preparación en la nevera la noche anterior.
Cuando la masa esté fría, es el momento de llamar a la familia para que te eche una mano con el moldeado y rebozado de tus croquetas.
- Puedes optar por darle forma con dos cucharas como es la forma más tradicional de hacerlo.
- Tus manos pueden ayudarte a crear las croquetas con forma de bolita.
- Si dispones de mangas de plástico desechables (las que usas para decorar pasteles) pueden servirte.
- Si no tienes, puedes hacer tu propia manga haciendo un embudo con papel de cocina o utiliza una bolsa de congelación de alimentos (más que nada para asegurarte de que ese plástico puede contener comida) y cortas uno de los vértices del tamaño que quieras que queden tus “churros”.
- Si vas a usar otro tipo de bolsa, límpiala. No basta con que parezca limpia. Que esté limpia es fundamental para que no se mezclen ingredientes.
San Jacobo
Si te ha gustado este artículo sobre cómo hacer croquetas, te encantará nuestra receta del tradicional San Jacobo. ¡No te la pierdas!