Es probable que si piensas en cómo será tu alimentación durante las vacaciones, tu cabeza te lleve a palabras como “descontrol”, “aumento de peso”, “exceso” … Pues bien, una de las claves para que esto no ocurra reside en el comer conscientemente. El comer de forma consciente te ayuda a escuchar tus señales de hambre y saciedad, y por tanto, te permite dar a tu cuerpo los nutrientes que necesita.
Las vacaciones son unos días de emociones muy intensos. Después de todo el año sin parar, llega el momento de la desconexión, las celebraciones, los reencuentros… En la mayoría de ocasiones, estos momentos suelen ocurrir alrededor de la comida, por lo que aprender a parar, escuchar tu cuerpo, aprender a comer con los 5 sentidos y no dejarte llevar por todas estas emociones tan intensas te ayudará a mantener una alimentación flexible y equilibrada durante tus vacaciones.
A continuación te dejo unos consejos para que el mindful eating te acompañe estas vacaciones. Puedes aplicarlos junto con el resto de tu familia.
Mindful eating en la cocina
El proceso de comer atentos comienza desde el primer momento en el que pensamos en elaborar una comida. Ir al supermercado y elegir los productos más nutritivos y adecuados para la elaboración de tus platos. Llegar a la cocina y crear el ambiente perfecto para esta elaboración, decorar una mesa bonita donde te vas a reencontrar con tus familiares, disfrutar de los aromas que van surgiendo irá satisfaciendo tus sentidos incluso antes de comer.
Te animo a practicar el Mindful Eating en la cocina con los productos de Arla. Puedes incluirlos en recetas como, por ejemplo, tomates rellenos de rúcula y Arla queso de untar, elaborado con ingredientes 100% naturales.
Come con los 5 sentidos
Según la práctica del Mindful Eating, tenemos 7 tipos de hambre, las cuales están relacionadas con nuestros sentidos. Invitar a nuestros sentidos a la fiesta que ocurre en la boca es indispensable para detectar cuál es la cantidad que tu cuerpo necesita en ese momento. Intentar prestar atención al olor, a las diferentes texturas que van surgiendo en la boca. Cómo van apareciendo unos sabores u otros, dependiendo el número de masticaciones, te va a ayudar a conectar con tu sensación de saciedad.
Te animo a que practiques este ejercicio con un trozo de queso de Arla: presta atención al olor y al color, a la textura que va surgiendo en la boca, a su sabor…
El equilibrio como invitado
Es importante que no olvides qué es lo que comes para nutrirte. Planificar con anterioridad los platos donde se encuentran todos los nutrientes que tu organismo necesita, te ayudará a saciarte tanto física como mentalmente.
Recuerda que se puede comer sano, sabroso y sin remordimientos, y que afortunadamente hay muchos productos, como los de Arla, con ingredientes naturales que podemos utilizar para incluir en nuestras recetas.
Deja las emociones
fuera de la mesa
Cuando estamos en un ambiente social, de celebración o desconexión, es muy común dejarnos llevar por estas emociones, por el momento, y comer sin tener en cuenta las necesidades de nuestro cuerpo. Por lo que, antes de empezar a comer, se recomienda parar y analizar cómo estoy, qué siento, y dedicar unos minutos a respirar profundo e intentar conectarnos con el momento de la comida.
Mindful eating y autocuidado
Prestar atención a tus necesidades y a las elecciones alimentarias que llevas a cabo desde el cuidado, el agradecimiento y la compasión hacia ti mismo y hacia las personas con las que compartes tus momentos de ocio estas vacaciones. Hará que estos días sean todavía mucho más enriquecedores.
Sin duda estas vacaciones tu alimentación puede ser diferente gracias a la práctica del mindful eating o alimentación consciente, ¿te animas a practicarlo?
